Había una vez un marciano llamado Martin pero él era
diferente no era agresivo como los otros marcianos era pasivo alegre y a
beses un poco temeroso. Jamás pobre
olvidar el día que llego a este mundo.
Era una noche
oscura casi toda la ciudad estaba apagada y en un momento repentino su nave
ilumino todo el cielo ¡no lo podía creer!
Estaba viendo un marciano, pero
apenas cuando empezaba a verlo su nave cayó frente a mi casa, fui a ver qué
había pasado con esa criatura de otro planeta, su platillo volador estaba
destrozado y el marciano muy herido. Me quede totalmente congelado al ver su
tamaño.
Lo lleve a mi
cuarto aunque me sorprendido lo poco que pensaba para su enorme tamaño al día
siguiente se despertó gritando sin saber que pasaba a su alrededor yo también
me asuste porque creía que se había herido cuando lo cargue a mi cuarto.
Cuando afín
pude callarlo me conto su historia de porque había venido al planeta tierra.
-Mi planeta está planeando dominar al
mundo, ellos dicen que son una raza inferior y sus armas no son tan avanzados
como las de nuestro planeando (Dijo Martin)
Me quedé
atónito en ese momento no savia que hacer ni savia a quien contarle primero le
conté a mis padres pero ellos simplemente pensaron que fue un mal sueño
Le había contado
a cada uno de mis familiares de todos obtuve la misma respuesta
Ya no savia
que hacer el único que me creyó fue mi perro fue mi perro tenía que tomarlo por
mi cuenta ya que nadie me ayudo. Le ayude a reparar la nave espacial a mi nuevo
amigo (Martin el marciano) realmente no fui de mucha ayuda porque su tecnología
era muy avanzada, pudimos armar un par de armas con las cosas básicas tuvimos
que esperar un par de días para que se recuperara y tomara fuerzas. Afín llego
el día estaba asustado pero savia que tenía que hacerlo al llegar el planeta
nos dimos cuenta que…
